...Que ni en verdad se llama Alba, ni es una "royal" que canta (como sí hizo S.A.R. Estefanía de Mónaco en los locos años 80). Su verdadero nombre,Trinidad Riveros, podría sonar más a cantante de mariachi o corrido que no a cantante pop. Y a falta de casoplón en la Riviera Francesa y un yate, sus diversiones más asequibles al salir del instituto eran, una vez puesto a lavar el uniforme, salir con sus amigas de parranda o a pegar gritos de ánimo al equipo de fútbol de su Santiago de Chile natal. Fue en el Estadio Monumental de la ciudad donde "colo-coló" la piedra inaugural de su celebridad: en el verano de 2017 aparece un videoclip llamado "Mi Only One" que incluye tomas grabadas con desorden aparente, looks de entretiempo (esto es, tops y faldas de talla XS combinadas con cazadoras de pelo sintético del Bershka, bailes más bien indolentes, muchos cigarrillos, algo de "twerk" en las gradas vacías del estadio y la bandera del Colo-Colo que ondea de vez en cuando. Afrontemos: no se ve una forma muy glamourosa de celebrar que tu equipo ganó la liga chilena de aquel año, pero supongo que eso importa poco cuando las reproducciones crecen, crecen y crecen.
En la primavera de 2018 aparece el primer EP de Princesa Alba llamado "Del Cielo Mixtape", seis temas equipados con toda la artillería del trap: beats arrastrados, autotune, reverbs, castellano alternado con inglés y arreglos que flotan entre lo soporífero y lo hipnótico. Sólamente la canción "Digital Angel" consiguió despertar mi interés. Al año siguiente, empero, la Princesa inicia una nueva retahíla de singles con los que ha ido obteniendo mejores registros mucho mejores en Monitor Latino (un chart construído en base a reproducciones de música latina registradas entre más de 700 emisoras de radio de varios países hispanoamericanos): con "Summer Love", la primera colaboración junto a su maridito Gianluca Abraza, alcanza el puesto 35 y le vale su primer single de oro. Meses más tarde, "Convéncete" convenció a más gente y la aupó al nº 24 de este conteo con bonus de single de platino. Otros temas que nos llaman la atención pueden ser "Me Equivoqué", "Mi Culpa" y "Hacerte Mal". ¿Las claves de esta evolución? Yo destacaría 1) la voz de Trinidad está despojada de autotune (algo que se agradece mucho) 2) los patrones rítmicos y los acordes están más definidos y 3) los videoclips son más sofisticados pero sin perder el toque de naturalidad.
Y llegamos al punto en el que descubro a nuestra artista, es decir, esta misma semana. Mientras escribo, tengo una sensación de dejà-vu : quienes seguís esta bitácora sabéis que un mes atrás me documenté acerca de otra artista que también venía de teñirse el pelo cada dos por tres, hacer trap, urban y "perreo-perreo" con erotismo al 200% y que de pronto dio un volantazo hacia sonidos de música que podrían haber bailado mucho antes sus padres o sus abuelos (¡exacto! Doña Doja Cat ). Lo que me lleva a preguntar si la norteamericana con la que celebramos el cumpleaños del blog ha influenciado directamente en este cambio de estilo; también está la incógnita de si realmente la chilena ha buscado ampliar su "target" de público y llevarse a sí misma a franjas de edad más adultas (como pueden ser los fans de su paisana Javiera Mena); y otra cosa no menos importante: ¿será este tema un toque de atención hacia bandas que sí llevan años haciendo disco-funk como los venezolanos Los Amigos Invisibles o, por qué no, los catalanes Tony Manero que he mencionado al empezar este artículo? Por lo pronto, si la cantante quisiera, podría presentar sus credenciales a bandas paisanas como Antes De Nacer, Sapien, Papanegro, Mandala o Los Tetas. Desde luego, no será por falta de oportunidades de colaborar con el funky en su país.
De nuevo, tenemos una pieza en tonalidad menor (esta vez Si menor, la "hermana menor" de Re mayor- dos sostenidos en la armadura-), pero a diferencia de la de Lele Pons del post anterior, aquí hay un poquito más de tela que cortar: de entrada, la armonía pasa por los siguientes grados de la escala: una parte va así: VI -V -I - IV, y la otra es casi idéntica, pero repite el grado tónico. Además, en la cadencia armónica, los acordes de los grados quinto y cuarto (Fa# mayor y Mi mayor respectivamente) no son los propios de la escala menor natural, sino que se "toman prestados" de los grados análogos de la escala de Si mayor.
Voilà! Un intercambio modal en toda regla.
Qué buena reseña, no le hago al trap, soy más del rock y del pop, pero bueno conocer nuevos artistas. En este caso, parece que sí tiene más leña que cortar y analizar que Lele Pons. Felicitaciones por tu buen blog. Saludos desde El Blog de Boris Estebitan.
ResponderEliminarHola Boris! Más vale tarde que nunca, pues justo hoy he visto tu comentario. Gracias por valorar el blog y, si lees esta respuesta, espero que te guste su nuevo aspecto.
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