Diletantes tod@s,
Ya que las circusntancias de salud
global debido a la actual pandemia del Covid-19 obligan a quedarse en casa
desde este fin de semana y ya veremos hasta cuándo (aunque yo personalmente no
sabré hasta el mismo lunes que viene si he de seguir yendo a mi “lavuro”: mis tareas
alimenticias actuales no puedo realizarlas a distancia), aprovechamos para
echar un ratito ameno en el blog y, de paso, entreteneros algo más . Y a pesar
de la actual expansión del coronavirus, parece que el único evento cultural que
no se ha suspendido a día de hoy (de momento) es…¡YASS! El próximo festival de
Eurovisión, que ha de celebrarse en Rotterdam (Holanda) a mediados de mayo. El
caso es que llevaba unos días algo perdido viendo tweets de Eurofans mirándose
ya con lupa la competencia que podrían tener Blas Cantó y su “Uni, universo” de
aquí a dos meses. Y justo en este día de encierro, mirando Twitter, me he
topado con esta MA-RA-VI-LLA que ya está haciendo las delicias del “fandom” del
Festival. Así que sin más dilación, os hablo de los ya firmes representantes de
Rusia en el festival musical con más “pajareo” por compás musical: con
dedicatoria a JuanmaJD de Madrid, aquí están los LITTLE BIG.
Nada más ver el video, mi primer pensamiento fue para el dúo Ladilla Rusa: si esta pareja de “humour
music” hubiera nacido en Rusia en vez de en Montcada i Reixach, muy probablemente
habrían publicado una canción así. Con un par de escuchas más, indefectiblemente te llega el recuerdo de esos iconos del dance saltarín noventero que son los holandeses Vengaboys.
Luego, tirando de las sugerencias de
YouTube, es cuando te reencuentras con su hit mayúsculo hasta la fecha, el “Skibidi” del año 2018 (que ya lleva más de 370 millones de reproducciones). Con semejantes cifras, la
pandilla de Ilya Ilich Prusikin tiene, como diría José Mota, “medio gorrino cazado”, y este “Uno” ya se acerca a los
15 millones de “plays” desde su alojamiento oficial de la ESC. Con esos trajes
de lamé y lycra apretados, un bailarín al que no le importa no tener el físico
de su paisano Rudoplh Nureyev y una
canción en “Spanglish” , si no ganan
el de este año, algo me dice que se van a pasear de nuevo no pocas terrazas,
programas de TV y Orgullos GLBTIQ como ya hizo desde 2017 (y por muchos años
más) otra no-ganadora, la chipriota Eleni
Foureira .
Como oiréis, la canción no tiene apenas misterio: son tres acordes de la tonalidaD de La menor, pero con un "truqui" (La mayor, Mi mayor y Re menor ) . A poco que dominéis de armonía, sabréis que el grado quinto de la escala de la tonalidad de La menor es Mi menor. ¿Y por qué aquí ese MI es mayor? Porque justo en ese grado de la escala, el quinto, se da un intercambio modal: se sustituye el Mi menor natural por el Mi mayor que resulta de tocar la escala en modo armónico (la escala mora). Misterio resuelto.
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