Espero que no andéis ni muy pasados ni muy pesados tras las comilonas típicas de esta Navidad ( pero aún queda Fin de Año y el Roscón de Reyes, así que, si podéis, resistid). Si os queda resuello, aquí os traigo el que, de momento, será el último AFÍNATE de este 2018 para que aprendáis a tocarlo. Hoy os traigo una pieza de pop-rock de los 80 cuya letra me viene personalmente de maravilla dedicársela a todos esos cabrones que en el último año han intentado quebrar mi paz de espíritu con sus malas artes, y hasta han tratado de meter veneno entre la gente con la que actualemente me relaciono. De momento no diré nombres, pero cuando me vea con ganas y abra la boca, os aseguro que levantaréis las cejas de tal modo que os darán una vuelta al cogote. Y hasta aquí podéis leer, Diletantes. A continuación, os hablo un poquito de QUARTERFLASH.
He aquí una banda estadounidense de AOR de los 80 que generaciones como la mía y más jóvenes considerarían con toda razón un "One Hit Wonder" : la realidad es que sólo hicieron fama y fortuna con un solo disco y sencillo: "Harden My Heart", la canción que os proponemos, fue la punta de lanza del LP homónimo del grupo encabezado por la vocalista Rindy Ross y su marido Marv Ross en 1981 (durante mucho tiempo creí que era más de finales de los 80, fíjate qué cosa). Éste fue el único trabajo que entró al Top 10 de la lista Billboard de álbumes. Otros tres álbumes publicados más adelante en los 80 y hasta 1991, corrieron una suerte bastante peor, quedando incluso en el 150 de dicha lista.
Desaparecerían durante más de una década, y ya en 2008, el matrimonio Ross, que nunca abandonó los circuitos musicales del estado de Oregón, sacaron un nuevo álbum con personal reformado, que se tituló "Goodbye Uncle Ross", que apenas tuvo difusión. La misma suerte corrió su siguiente trabajo", ya en 2013, titulado "Love Is A Road". Si en su época buena tenían un sonido urbanita bastante afín a Foreigner, Survivor, Asia o los Eagles post-Hotel California, estos dos últimos discos tienen un sonido más bien folkie y sureño, totalmente alejado del rock urbanita que enamorara a las radios americanas tiempos atrás.
Recordad que nos vemos en el blog en el último día del año para la que bailéis, antes, durante o tras las uvas de Nochevieja, mi particular retahíla de canciones que más me han movido en este año. ¡Besetes con cava!
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